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martes, 9 de mayo de 2017

COSTILLAS A LA BARBACOA



Estas costillas tenéis que hacerlas sí o sí, tienen un sabor riquísimo, salen supertiernas y son muy fáciles de hacer. Podemos acompañarlas de patatas fritas o asadas. Si queremos hacer algo más ligero acompañarlas, como hice yo en esta ocasión, con una coleslaw.
Las especias son un poco al gusto, si no os gusta alguna eliminadla o poner más de alguna cosa que de otra. Id probando hasta que encontréis vuestra combinación favorita. Seguro que de todas las maneras estarán ricas porque es una carne muy agradecida y admite multitud de combinaciones.

INGREDIENTES:

- Un costillar de cerdo que pese sobre 1k o 1,5
- 3 dientes de ajo
- Una cucharadita de semillas de cilantro
- Una cucharadita de comino
- Una cucharadita de pimentón
- Pimienta negra molida al gusto
- 1 cucharada sopera de miel
- 1 chorro de ketchup, como 2 cucharadas
- 1 chorrito de vinagre
- Un buen chorro de salsa de soja
- 1 vasito de vino blanco 
- 1  poquito de aceite de oliva

ELABORACIÓN:

En primer lugar hacemos la marinada. Para ello machacamos en un mortero las semillas de cilantro y comino, reservamos. 
A continuación, machacamos los ajos con un poco de sal para hacerlo más fácilmente. Cuidado con la sal porque luego pondremos salsa de soja y ya aportará salado al plato.
Echamos en el mortero el cilantro y comino que habíamos reservado y el resto de ingredientes.
Removemos para que se mezclen todo bien.
Cubrimos el costillar con la marinada y nos aseguramos de que todo quede bien impregnado. Tapamos y guardamos en el frigorífico al menos un par de horas, aunque lo ideal es hacerlo de víspera. Si queremos podemos dar la vuelta al costillar para que coja bien el sabor por todos lados.
Precalentamos el horno a 180º.
Ponemos sobre una bandeja de horno el costillar junto a la marinada. Tapamos con papel de aluminio sellando bien los bordes para que no se escape el vapor y metemos en el horno sobre 1,5 horas a 2 horas.
Si las costillas que habéis comprado son más gruesas comprobar que estén blandas antes de ponerlas a dorar, si lo necesitan dejamos más rato.
Después lo sacamos, quitamos el aluminio, subimos el horno a 200º y dejamos las costillas hasta que estén tostaditas, le damos la vuelta para que se doren por ambas partes. 
¡Os vais a chupar los dedos!


2 comentarios:

  1. Las costillas quedan deliciosas. Admiten mil y una variantes de combinación de especias y siempre salen ricas ¿verdad? ¡Me encantan estas! ¡qué buena pinta tienen!

    ¡Besos mil!

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    Respuestas
    1. Cierto, son de lo más agradecidas. Siempre salen bien con poco que pongas.

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